Sin ninguna duda, lo primero que llama la atención es el espectacular Ángel de la Mercadería, situado en el tímpano de la puerta principal. Es obra de Sagrera y la pieza escultórica más elegante y remarcable del gótico en Mallorca. Sus grandes alas, la expresión del rostro y los detalles, que originalmente estaban policromados, resultan excelentes. El tema del ángel, símbolo del comercio, se repite muchas veces en la Lonja.